miércoles, 2 de diciembre de 2020

HILLBILLY ELEGY

 Ficha técnica

Título: Hillbilly Elegy
Guión: Vanessa Taylor
Director: Ron Howard
Año: 2020
País: Estados Unidos
Duración: 116 min
Reparto: Amy Adams, Gabriel Basso, Glenn Close, Haley Bennett, Owen Asztalos, Freida Pinto, Bo Hopkins, William Mark McCullough, Jesse C. Boyd, Deja Dee, Tierney Smith, Lucy Capri, Sunny Mabrey, Stephen Kunken, Ryan Homchick, Ed Amatrudo, Holly A. Morris, Jason Davis, Keong Sim, Ethan Levy
Productora: Imagine Entertainment, Netflix
Fotografía: Maryse Alberti
Música: David Fleming, Hans Zimmer
Género: Drama



 “Nuestro origen nos define, pero todos los días elegimos en quién nos convertiremos”


“Hillbilly es un término peyorativo para referirse a los habitantes
 de las zonas rurales de Estados Unidos”.


Hilbilly elegy es una película dirigida por Ron Howard para Netflix basada en la novela autobiográfica homónima de J. D. Vance.

J. D. estudia derecho en Yale, vive con su novia y está haciendo entrevistas para conseguir un trabajo con los mejores abogados del país. Un día, recibe una llamada que le hace volver a su pueblo natal al sur de Ohio, lo que le hace revivir su infancia dentro de una familia disfuncional y toda la carrera de obstáculos que tuvo que superar en busca de una vida mejor.

Hillbilly elegy relata lo que supone “el sueño americano” para aquellos que, aun formando parte de la sociedad americana, son discriminados por su procedencia social. El protagonista tiene que lidiar durante toda su vida con las trabas que la propia sociedad le pone para conseguir unas condiciones de vida mejores que las que tuvieron sus padres y sus abuelos, pero también con sus propios problemas personales dentro de una familia que supone más una carga que un apoyo. 

En definitiva, Hillbilly elegy es el relato de una vida con sus luces y sus sombras, sin más. En ocasiones puede resultar un relato algo plano debido a su exceso de drama y a la ausencia de puntos de giro potentes. Sin embargo, la gran interpretación que nos regala Glenn Close rompe en varias ocasiones con esta monotonía y es la conductora de los mejores diálogos y escenas del filme, junto con Amy Adams.

Puede que a este largo le falten algunos puntos de luz que hubiesen dado un respiro tanto a los personajes como al espectador. Escenas que retratasen la visión inocente e ignorante de la infancia de J. D. en el contexto en que esta se desarrolla. Quizás sea este el punto que le falta a Hillbilly elegy para ser una gran película. Esto habría aportado mucha más carga emotiva a la trama además de luz, complejidad emocional y énfasis en los momentos clave de la vida de los protagonistas, a la vez que ampliaría el marco vital de los personajes. 

Otro de los elementos que perjudica a la trama es que peca de una gran dosis de demagogia acerca de la clave del éxito y la superación de las adversidades. La demagogia de la que hace uso en algunas escenas junto con el dramatismo de toda la película no es la mejor combinación de elementos para alcanzar el éxito.

Sin embargo, Hillbilly elegy nos regala buenas interpretaciones y un viaje a través de los primeros años de la vida de J. D. muy bien construido  y con escenas muy narrativas acerca del contraste que existe entre la imagen que se vende de la vida entre rascacielos y calles abarrotadas en Norteamérica, y las dificultades de las zonas más rurales y alejadas de los grandes núcleos urbanos.

Hillbilly elegy no es una película mejor ni peor que otros dramas cotidianos que relatan la lucha de los personajes por conseguir un puesto mejor en la sociedad. Desde luego no es merecedora de elogios, pero quizás tampoco lo sea del desprecio al que se ha visto sometida desde su estreno.